domingo, 13 de noviembre de 2011

Trucos sucios.

No lo tenia que haber hecho.
Para empezar,no me apetecía nada esa reunión familiar. Pero claro, son su hermana y su cuñado, hace poco fuimos nosotros a su casa, y total, yo no tengo que cocinar. Y son simpaticos.Lo que pasa es que parece que todo el mundo está esperando que tengamos un finde sin crios para buscarnos algún plan.
Y me da cierta angustia cuando gente de su familia viene a casa.Ellos viven todos en sitios mas grandes. Pero el caso es que acabamos planificando esa cena, y se hizo.
Algo sencillo, había dicho mi chico. Pero claro, el cocina diariamente para cientos de personas, asi que su idea de algo sencillo resultó ser algo que yo no consideraba sencillo en absoluto. Aunque el lo hizo como si fuera un par de huevos fritos.Ambiente distendido, cena abundante, bebida...
No debí ignorar esos gestos casi imperceptibles cuando me llenaba no se si por tercera o cuarta vez la copa. En una ocasion, me dijo, sin ningun disimulo."cielo, te has llenado la copa seis veces..."y le respondi "siete", volviendomela a llenar.
No me emborrache ni nada de eso. Y tampoco fui la que mas bebió,porque al final mis cuñados tuvieron que quedarse a dormir. Y eso me dio una tregua que necesitaba.
El momento de afrontar consecuencias llego esta mañana, cuando se fueron.
Bajamos con ellos a la calle a despedirlos.Y una vez solos, trate de convencerle de dar un paseo, diciendo que necesitaba una caminata para quemar calorias. Me respondio que lo que yo necesitaba era recibir unas cuantas azotainas, y que subiamos a casa, pero ya mismo.
A base de pausas para regañar, la primera duró casi una hora. Se detuvo porque me decia que su mano no aguantaba más, y que ya estaba yendome al rincon a pensar mientras decidia el resto del castigo. Pero me adelanto que , ignorar las señales de no beber, lo consideraba desobediencia. Como no soy tonta y le voy conociendo, se que la palabra desobediencia implica que el cinto va a aparecer en algun momento.
No iba a ser tan rapido. Me tuvo media hora en el rincón, y volvi a sus rodillas para una buena dosis de zapatillazos.Me dijo que además, estaba castigada. El se iba a ver a sus padres un momento,y yo mientras debia limpiar la casa.
-No te hagas ilusiones que esto no ha terminado.Volveré a azotarte con el cepillo cuando vuelva,y con el cinto despues de comer.
Tenía que hacer algo , claro. Porque si, yo puedo reconocer que me he ganado una azotaina,pero no cuatro.Lo malo es que le conozco, y una vez ha dicho que lo va a hacer, lo hará.
Pero una tiene sus recursos. Al menos, he pensado que podia convertir la sancion en algo mas placentero.
Una hora después me ha encontrado terminando de limpiar, tal como me habia dicho. Y.. ¿ que mejor indumentaria para limpiar que la bata que me regaló?. Y claro ¿ para que iba a llevar nada debajo?. Y si mi chico viene de la calle, es normal que le reciba en plan cariñoso ¿no?.
Ha empezado a decirme que eso era una treta para evitar el castigo, que en lo iba a conseguir, que podia incluso empeorar mi situacion, pero estaba respondiendo a besos y caricias, y el tono severo ya no lo era tanto. Cuando ya casi estaba segura de librarme, me ha pedido que fuese a por el cepillo. Recibi ese castigo, claro, pero con muchas pausas, caricias entre medias y un rapido pero efectivo consuelo despues.
La comida ha sido algo ligero. Y al terminar, me ha dicho que fuese al dormitorio, colocase las almohadas y le esperase preparada. He suplicado que me perdonase, alegando que me dolia mucho, que habian sido muchos azotes, pero me ha recordado el tema de la desobediencia.
-Lo mereces, lo necesitas, y es mi deber.
Asi que hice lo que me pidio, y enseguida oi sus pasos hasta el dormitorio.Le mire de reojo, mientras se quitaba el cinturón y lo doblaba.
-No muchos, cariño. Por favor...
-Depende de ti.Si me das muestras de que has aprendido, solo seran veinte.
Las muestras de que ha aprendido son: contarlos, responder adecuadamente cuando pregunta si me lo merezco, prometer constantemente no repetir la falta,y agredecerle, al terminar, su esfuerzo y su constancia para educarme. Lo hago perfectamente, no quiero mas de veinte.Y esta vez, los mimos no son tan escasos, y las consecuencias no son tan rapidas.

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